La denunciante, junto a abogados vinculados al macrismo, intentan apartar a la fiscal Mónica Cuñarro. En el expediente quedó en claro que viene de acusar a su madre por violencia física y a su abuelo por haber intentado matarla. En ambos casos pidió un resarcimiento.
Recordemos a El intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, y Melody Raskaukas, quien fue su secretaria y lo denunció por abuso sexual, tendrán este jueves una audiencia de mediación por una denuncia por daño moral que la mujer inició contra el dirigente político
Espinoza tiene un procesamiento confirmado por abuso sexual contra Raskaukas y por desobediencia a una orden judicial. En paralelo a ese expediente judicial la mujer inició una causa civil por daño moral por el hecho que sufrió. Antes del inicio formal de esa causa se debe hacer una audiencia de mediación para intentar que las partes lleguen a un acuerdo.
Los magistrados compartieron la postura del fiscal Mauricio Viera que había dictaminado para que se confirme le procesamiento. En tanto, la defensa de Espinoza había pedido que se revoque el procesamiento. La Cámara también ratificó el embargo de 1.500.000 de pesos sobre los bienes del intendente.
En la denuncia contó que durante la cena Espinoza le dijo que estaba contracturado y le pidió masajes. Ella le dijo que no y lo mandó a descansar, pero la respuesta fue: “No tengas miedo, dale”. De manera intimidante se desabrochó la camisa, afirma la denuncia. Le dijo que no tuviera miedo porque “las mujeres de sus amigos tenían bigote”.
“Fernando, no sé qué vas a hacer pero te pido que no, te pido que te vayas de mi casa”, le dijo la mujer. Pero Espinoza “una vez dentro de la habitación se quitó el pantalón, la camisa que previamente se había desabotonado y quedó en ropa interior”. Cuando volvió a pedirle que se fuera, “el imputado la sujetó fuertemente, indicando la víctima que no recordaba exactamente cómo pasó, pero que él logró terminar encima de ella en la cama”.
Y durante ese lapso, el imputado comenzó a besarle la zona de sus pechos y a tocarla por encima de la ropa mientras le decía “quedate tranquila, siempre te tuve ganas, va a estar todo bien” y le pedía que le practicara sexo oral, intentando a su vez quitarle las prendas que vestía en contra de su voluntad, lo que habría llevado a que le rompiera la camisa que ella tenía puesta, además de intentar bajarse su propia ropa interior, lo que no consiguió porque la víctima hacía fuerza para impedirlo. “Bueno lista ya está se terminó todo, me voy, ya está no te preocupes. Sos una boluda, no sabes lo que te perdés pero bueno, allá vos”, le respondió Espinoza.